Por más de tres horas el destacado cantautor cubano cautivó al público dominicano en una noche marcada por la calidad y la buena música.
Santo Domingo, R.D.- El esperado concierto de Francisco Céspedes bajo la producción de Vibra Productions se llevó a cabo la noche del viernes en el Teatro Nacional, con una gran asistencia de un público ávido de sus canciones, las que por más de tres horas, entre anécdotas e invitados de lujo, hicieron volar a todos los presentes.
Con la antesala del joven cantautor dominicano Badir, quien se perfila como el bohemio de la nueva generación de artistas y que desplegó su talento por todo lo alto desde el inicio de la velada cerca de las 8:44 de la noche.
Pancho, como siempre, hizo una entrada inolvidable, con esas palabras que conectaron de inmediato y que resaltaron a un grande de la música, nuestro Jhonny Ventura, quien en pantalla gigante fue homenajeado por el artista que contó lo cercanos que fueron, y recordándole, visiblemente emocionado, a través de esos momentos que les marcaron. La familia de Jhonny estuvo presente para vivir este emotivo instante, donde Pancho dejó sentir su gran respeto y admiración, respondiéndose con su icónica canción «Donde está la vida».
La improvisación y las historias hicieron de la continuación del concierto un descubrimiento para todos. Sin guión, sin pautas mayores que la misma calidad y desenvolvimiento del artista, sus canciones se fueron plasmando en el escenario; «Parece que», «Que tú te vas», «Todo es un misterio», «Quédate más», «You are so beautiful» y «Oye bien la clave», precedieron a la entrada de su primer invitado en escena, Pablo García, quien estrenó junto a Pancho el tema «Que manera tan loca», de la autoría de William Liriano, y quien como siempre, se destacó por su gran desempeño en escena y por la potencia de su voz.
Nuestro Pavel Núñez hizo su entrada en compañía del gran músico cubano Carlos Luís, mostrándose la unión y la complicidad entre estos artistas que dejaron el alma en las melodías de canciones como «Que hago contigo», «Pudo ser», «Perla Marina» y «Longina», reuniéndose al final de este momento los cinco cantautores (Pancho, Pablo, Pavel, Badir y Carlos Luis) en el escenario, para deleitarnos con boleros como «Sabor a mí», «Corazón de doble filo», «El día que me quieras» y «Bésame mucho», que cada uno de forma individual iban cantando.
Francisco recordó esas canciones que compuso y que otros artistas hicieron suyas, como «Pensando en ti», la que popularizó inicialmente el reconocido intérprete Luis Miguel, y que puso a toda la sala a cantar al unísono, continuando con «Nadie como tú», que la agrupación española Presuntos Implicados hizo suya a finales de los 90´s.
Grandes éxitos como «Señora a veces la vida», y «Remolino», llevaron a la audiencia a una especie de clímax que resonaba hasta las afueras del teatro, dando paso a la interpretación cautivante de Julio Baró, el pianista de Pancho, quien se lució con «Yo quiero un mundo contigo».
«Vida Loca» dio el punto final al concierto cerca de las 11:50 de la noche, con un público de pie, que se llevó toda la música del artista y más, en una noche que quedará en los corazones de todos los presentes.