SANTO DOMINGO, RD.-El ex magistrado de la Junta Central Electoral (JCE) y vocero del ex presidente Hipólito Mejía, doctor Eddy Olivares, consideró que hay una campaña de terror y miedo para provocar una alta abstención con la supuesta manipulación de los datos del Covid-19 por parte del gobierno.
Entrevistado por el periodista Federico Méndez, en el programa Esferas de Poder, que se transmite los domingos de 8:00 a 9:00 de la mañana, por RNN Canal 27, sostuvo que el país está esperando unas buenas elecciones, el 5 de julio, al margen de esa supuesta manipulación.
Manifestó que uno de los principales retos que tiene la población es vencer el miedo e ir a votar en los comicios, porque los recintos de votación estarán debidamente protegidos.
Olivares insistió en que hay un terror para provocar la abstención más alta posible, en los comicios, “bajo el criterio de que tienen un colchón de votos producto de la utilización del Estado en la campaña”.
El jurista afirmó que en esa parte, la Junta Central Electoral no ha intervenido para evitar que esa situación siga ocurriendo.
“De modo, que la Junta Central Electoral tiene que ir cada día ganándose la confianza del electorado, no solo tomando las decisiones correctas para el montaje de las elecciones, sino garantizando la integridad de del proceso electoral”, recalcó.
A juicio de Olivares, la única posibilidad que ve el Partido de la Liberación Dominicana para tratar de impedir el triunfo en primera vuelta del candidato presidencial del Partido Revolucionario Moderno, Luis Abinader, es generando terror para provocar una alta abstención.
“Nadie cree en los datos que ofrece el ministro de Salud Pública, que es un activista de la campaña, con la misión fundamental de dar informaciones que aterroricen al electorado, ese es su propósito y así ha venido haciéndolo desde el principio”, argumentó.
El jurista opina que los datos que ofrece el Salud Pública son alegadamente manipulados y con un propósito fundamentalmente electoral.
Sin embargo, el ex magistrado electoral entiende que las elecciones del 5 de julio tendrán una mayor participación que las del 2016, en la que votó el 69% de los electores.
“En estas elecciones, estoy absolutamente convencido de que va a votar más del 70%, es decir, superior a la votación de las elecciones anteriores, las del año 2016”, agregó.
Sostuvo que cualquier intento para provocar abstención electoral será vencido por la voluntad firme del electorado, de producir un cambio y el compromiso por la democracia.
Olivares indicó que no corre ningún riesgo quien vaya a votar en las elecciones del 5 de julio próximo, las que recalca serán muy participativas y exitosas.
“El montaje va muy bien y hay que reconocer que la Junta Central Electoral, aún en el momento más alto de la pandemia, se mantuvo cumpliendo de una manera rigurosa con el cronograma electoral”, adujo.
Olivares dijo que esa situación ha permitido que actualmente se encuentre ese programa electoral “cumpliéndose como un reloj suizo”.
Expuso que como consecuencia de esa correcta decisión de la JCE, hoy se cumple a cabalidad con el cronograma y no tiene la presión que hubiese tenido, en caso de no haberlo hecho de esa manera.
“Ya en el exterior, donde hubo dificultades para la implementación del voto, también se encuentra acorde con el cronograma electoral y están trabajando en la contratación de los recintos, me parece que han concluido todas las demarcaciones con la contratación de los recintos de votación”, subrayó.
El ex fiscal de la provincia de Santo Domingo observó que el exitoso montaje de las elecciones municipales le dio a la JCE cierto nivel de credibilidad, cuando antes de esos comicios se encontraba en su peor momento frente a la nación.
Comentó que esos preparativos, en coordinación con los partidos políticos, la ayudaron a rescatar un poco la confianza.
“Ahora la Junta ha trabajado de una manera correcta en el montaje de las elecciones, pero no ha cumplido con su rol de garantizar que las elecciones sean libres, que sean objetivas, transparentes y equitativas”, enfatizó.
Basó su criterio en que la JCE no ha tomado ninguna medida que eso ocurra, lo que coloca la situación en su lado más cuestionable con relación al proceso del 5 de julio.