jueves, diciembre 12, 2024
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Una fe impertinente…

POR ROSMARIE PÉREZ 

La palabra impertinente por su significado nos puede indicar a una persona que nos habla de manera grosera, con falta de respeto, bíblicamente, podría decirse que se refieren a personas que importunan con sus palabras o actos, porque están fuera de lugar o porque son molestos……

Pero que tal si en el día de hoy lo visualizamos desde otro ángulo, si lo usamos para ser impertinentes en nuestra Fe, la Fe en el libro de Hebreos 11:1 dice la Palabra, que la Fe es la certeza de lo que se espera y la convicción de lo que no se ve, por tanto muchas veces tendremos que importunar para ver nuestro milagro hecho una realidad, para traerlo del mundo espiritual al natural.

Cada día vemos menos milagros manifestados en la vida Cristiana, Dios ha cambiado, ya Él no es el mismo del que las escrituras hablan que abrió el mar rojo o que sacó a Lázaro de la tumba? Claro que no.

Él no ha cambiado, Él es el mismo ayer, hoy y siempre, nosotros somos los que cada día como pueblo de Dios estamos permitiendo que espíritus de duda e incredulidad designados por el mismo infierno nos estén robando los milagros, cada día hay menos milagros de sanidad, de liberación, de provisión y restauración, y los pocos que hay las personas se los callan, les da vergüenza testificar que Dios los sacó de una situación de miseria, de una enfermedad de muerte, de una situación de divorcio.

Ahora vivimos grabando y televisando los pocos milagros que hay en las Iglesias para mantener la Fe de un pueblo que cada día está más alejado de los caminos de Dios, pero y dónde es que reside el problema porque si Dios es el mismo y no ha cambiado, que es lo que ha cambiado?

Nosotros hemos cambiado, el mismo Jesús dijo “ …Pero cuando venga el Hijo del Hombre, ¿hallará fe en la tierra?….” Lucas 18:8…
Jesús sabía que cada día nuestra Fe iba hacer menos, y sin Fe es imposible agradar a Dios, Hebreos 11:6.

La Fe la mata la religión, la fe la mata la levadura de los fariseos, la doble vida, la duda, la incredulidad, el doble ánimo, Jesús lo advirtió y es que la Palabra nos muestra el camino y nos lleva a la verdad, pero está en nosotros usar esa verdad.

La hipocresía es esa levadura, en el pueblo de Dios cada día crece más “ la doble vida “, “el pretender ser cristiano… las apariencias”, en las dos lecturas bíblicas de la multiplicación de los panes y los peces podemos ver establecido lo que hablo, en la primera multiplicación vemos que sobraron 12 canastas, para los 12 discípulos de Jesús que preguntaban como le iban a dar de comer a esa multitud tan grande, Marcos 6:30-44,
en la segunda multiplicación solo quedaron 7 canastas, Marcos 8:1-10.

Por qué aconteció este hecho? La levadura ya estaba afectando a la multitud y a los mismos discípulos de Jesús, que estaban endureciendo sus corazones al Poder de Dios, hoy está aconteciendo lo mismo, seguimos mandamientos de hombres, ritos, tradiciones, la hipocresía ha calado en lo más profundo del corazón del hombre, estamos más preocupados en el “ prestigio “ en como nos “ ven “ los demás, que agradar a Dios.

Si quieres recibir tú milagro, entonces tendrás que ser impertinente con Dios, importunarlo en oración, en ayuno, en búsqueda de Su presencia, en leer las escrituras pero sobre todo tener esa Fe impertinente que hasta que no recibas la respuesta no vas a dejar de clamar ante Dios para que responda a esa necesidad, a esa sanidad, a esa liberación de tus finanzas, de tus hijos, de tú matrimonio y de tú familia.

Hay una mujer en la Biblia que fue impertinente, supo importunar a Jesús hasta lograr que su hija fuera liberada, en el evangelio de Mateo 15:21-28, vemos a una mujer gritando a voces atrás de Jesús, ella gritaba y Él la ignoraba, pero a ella no le importó, ella sabía lo necesario de su urgencia, era su hija la que padecía y ella necesitaba que Jesús la liberara, gritaba y gritaba a voces el nombre de Jesús, los discípulos avergonzados le dijeron a Jesús que la despachara, y Él la ignora más y continúa caminando.

Cuanto de nosotros nos rendimos al mes de estar clamando, solo porque no vemos nada, quizás años en los mejores de los casos y aún nada, y es ese nada lo que nos debilita porque vemos en lo natural y no en lo espiritual, si estás cansado/a, hay agotamiento, ese es el momento de arreciar en el clamor, el enemigo ha estado estudiándote, él sabe cuanto duras en fe orando y cuando te vas cansando, cuando estamos acercándonos al rompimiento el agotamiento es terrible así que no te canses, sigue, continúa, que esa pared se está desmoronando….

Volviendo a la mujer Cananea, ella siguió importunando a Jesús, llega donde Él y se postra y le dice: “ Señor, socórreme! “, Jesús le responde con unas palabras muy duras y difíciles, “ No está bien tomar el pan de los hijos, y echarlo a los perrillos”, Jesús le dice “ perrillos “, es decir que ella era de un pueblo que no era bendecido por Dios en ese tiempo, recordemos que Dios había apartado a Israel como Su pueblo, y era después de la muerte de Jesús que nosotros los que no éramos pueblo, a través de creer en Él y recibirlo como nuestro Señor es que pasamos a ser Sus hijos e hijas, Juan 1:11-13.

Esta mujer tenía una Fe tan impertinente que no quiso escuchar esas palabras tan hirientes de parte de Jesús, ella se enfocó en su milagro y le responde las palabras más humildes que podríamos escuchar en una persona que no era del pueblo elegido por Dios, “…Si, Señor; pero aún los perrillos comen de las migajas que caen de la mesas de sus amos…”
Mateo 15:27, tremenda respuesta….

Ella le dijo a Jesús con esas palabras, no me importa la humillación, no me importa si todavía no es tiempo para recibir mi milagro porque aún no has muerto y mucho menos resucitado, no me importa como me miren los demás y me desprecien, yo creo que Tú puedes liberar a mi hija y si tengo que recibir este escarnio lo recibo, me lo merezco, pero de las migajas que me quieras dar, de ahí yo recibiré mi milagro…..

Y sabe qué? ….ella recibió su milagro, él mismo Jesús dijo “ oh mujer, grande es tú fe ; hágase contigo como quieres. Y su hija fue sanada desde aquella hora”… Mateo 15:28..

Gloria al Señor Jesús, Él ignoraba a propósito a esta mujer, Él sabía lo que ella necesitaba pero Él quería probar la fe de esta mujer, quería saber hasta donde podía ella llegar por su milagro, y la humilló para ver su corazón ante Él, y la actitud de esta mujer fue de humillación porque la misma Palabra nos dice que un corazón contrito y humillado Dios no despreciará……

Ella salió victoriosa, hoy debemos inspirarnos en estas escrituras para tener una Fe impertinente, para seguir clamando hasta que llegue la respuesta, que no importe quien nos humille ó señale, vemos en 1 Samuel 1:14-15 a Ana, que el sacerdote Elí la confunde, la juzga equivocadamente que está borracha y ella no le responde mal al hombre de Dios, ella honra la vestidura espiritual del sacerdote Elí y por esto recibe su milagro.

En Lucas 18:1-18 podemos ver a una viuda que importunó a un juez injusto hasta recibir su respuesta, muchas más nosotros dice nuestro Padre que nos dará si clamamos día y noche a Él….

La mujer del flujo de sangre también fue impertinente, sufriendo esta enfermedad por 12 largos años, había sido despreciada por su condición, lo había perdido todo, sin fuerzas, enferma, escucha que Jesús estaba pasando cerca y ella sin importar la multitud, sin importarle que la despreciaran ella se abre paso y toca el manto de Jesús e inmediatamente recibe su milagro,
Lucas 8: 43-48.

No sé cual es tú necesidad, pero hoy es el día que debes levantarte y ser impertinente en oración, en clamor, clama hasta que Dios suelte tú milagro, Él está esperando que lo importunes, Él quiere despertar a ese hombre a esa mujer de Fe que eres tú, Él está esperando que te levantes del suelo y clames con el corazón hasta recibirlo, Él sabe lo que ha puesto en ti, pero que se ha dormido por lo duro de la prueba, quizás ha permitido a un Elí que te juzgue mal, o varios, pero honra al ministro y enfócate en tú milagro.

Hay milagros que debemos pelearlos en el espíritu y solo una Fe impertinente lo puede hacer manifestar del mundo espiritual al natural importunando al Dios de los milagros, despierta Iglesia, Dios quiere que te levantes con el Poder que te ha entregado en tus manos.

Oro a ti Padre, escucha el clamor de Tú pueblo, yo sé que eres el Dios de los imposibles, que Tú Palabra tiene el Poder de manifestar milagros como nunca antes, oro al Dios de Elias, al Dios de Elíseo para que manifiestes Tú Gloria en aquellos que les vas hacer leer estas palabras, sanas enfermedades, abre caminos donde no los hay, restaura familias, hijos, matrimonios con Tú Poder, acaso hay algo imposible para Tí ?, yo sé que no…. A Tí clamo para que te manifiestes como nunca antes sobre aquellos que necesitan un milagro, te lo pido en nombre de Jesús, amén…

Bendiciones
Rosmarie Pérez

Hebreos 11:1
Reina-Valera 1960

La fe
11 Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.

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