POR ROSMARIE PÉREZ
La figura del Padre es una figura muy importante en el hogar, lamentablemente con el tiempo ha sido desvalorizada y en muchos caso no ejercida, pero ejercida o no, es crucial en la familia y en todo hogar que quiera tener hijos sanos, tanto físicamente como emocionalmente, tenerlo.
Comencemos con la definición, ser Padre es esa figura protectora, es ese hombre que vela y se preocupa por el bienestar, provisión y estabilidad de sus hijos.
Es aquel que nos da identidad en el hogar, que nos hace crecer seguros, confiados, son esos héroes que nadie ve, que cada día salen a buscar el sustento de sus familias, para darles a sus hijos lo que en muchos casos, ellos mismos no tuvieron.
Pero entonces por qué cada día se van viendo tantos hogares abandonados?, sin esta figura tan importante, y en los casos en que todavía están, se desvalorizan su persona hasta tal punto que muchos deciden soltar todo e irse.
Claro, como en todo hay sus excepciones, aquellos que el llamarlos padres es un nombre muy grande para ellos, pero este no es así en todos los casos.
Y es que entre más “ avanza “ supuestamente la sociedad, en la que las mujeres han sido empoderadas a trabajar, hacer líderes y no dejarse pisotear, lo cual aclaro, no es que esté mal esto sino sus extremos, porque es ser equilibrado en todo lo que hacemos es que nos puede llevar a tener mejor calidad de vida.
Las mujeres que se han visto en la necesidad de trabajar y sacar a sus hijos adelante, por hacer este rol van creyéndose las cabezas del hogar y ni que decir, si son las que llevan más al hogar, ahí se pierde totalmente los roles de padre y madre que se debe llevar en el hogar.
Se que este tema no les agradará a las de mi género pero lamentablemente, sin querer ofender a nadie, hay cosas que hay que decirlas, quizás estas palabras caigan en buen terreno y den frutos en sus hogares.
Hay leyes espirituales que Dios ha establecido en el hogar, con las cuales debemos vivir, establecerlas y respetarlas, si queremos hogares sanos e hijos desarrollados correctamente en una sociedad, que va en declive cada días más.
Y es en el hogar donde todo se está generando.
Dios ha puesto como cabeza del hogar al hombre, Efesios 5:22-33, y la mujer debe estar sujeta a su esposo, como la misma Iglesia debe estar sujeta a Cristo, y es aquí donde este mal comienza, cuando nosotras no hacemos esto y comenzamos a faltarle el respeto al hombre quitándole la autoridad delante hasta de nuestros propios hijos, hablándoles mal a nuestros hijos de sus padres y cometiendo todo tipo de deslices, humillando este ser que Dios mismo ha puesto como cabeza.
Y si no respetamos este principio, lamentablemente todo se va a desmoronar, ahí le abrimos nosotras mismas las puertas a satanás a nuestros hogares y él no vacilará ni por un segundo en destruirlo, es ahí donde está creciendo ese fenómeno de que decido si soy hombre o mujer, por la falta de identidad que es provocada en el hogar donde los roles de cada quien están turbios ó se reemplazan.
El hombre no es sentimental como nosotras, el hombre busca ser respetado, ser el súper héroe del hogar, ser el que todo lo sabe y el que todo lo puede, y es ahí que nosotras las mujeres debemos mostrar nuestra mayor sabiduría y entendiendo de este principio para ponerlo por obra en el hogar, nuestros hijos lo necesitan.
No estoy hablando de que se deje abusar o golpear, o que viva humillada toda su vida mujer, hablo que en la base del Amor, Amor a sus hijos y a su propia pareja busque el equilibrio dejando que sea su esposo quien ejerza su rol como padre, tomando decisiones, llevando el mantenimiento del hogar, aunque usted lo ayude, pero deje que sea él quien sustente, tome decisiones, guíe a su familia, y usted con sabiduría de Dios, le ayudará dando pautas, permitiendo que sea el Padre quien brille para sus hijos, que sea su Súper Héroe…
Ellos lo necesitan, la sociedad lo necesita, porque de ello depende la estabilidad en el hogar, depende la identidad y estabilidad de nuestros hijos…
Respeto, tanto que hablamos de eso en todos los órdenes de nuestras vidas y es lo que menos brindamos, a todos los niveles sin excepciones.
Esa paternidad la necesitamos, como necesitamos la paternidad de nuestro Padre del cielo, de Dios, Él nos regaló la vida, nos creó a Su imagen y semejanza, es cuando lo recibimos a Él en Fe en nuestro corazones y creemos en Él, que podemos ser llamados hijos de Dios, Juan 1:11-12.
Es en Él que tenemos identidad, es Él el que nos da seguridad, respeto, Amor, confianza, reconocimiento, protección, regocijo, es Él que nos representa, es Él que nos da alegría, pero lejos de Él somos huérfanos, sentimos abandono, no tenemos respeto ni identidad, nos sentimos desorientados, solos y sin felicidad.
Así mismo sucede en los corazones de cada hijo/a que no tiene a su padre con él.
Para tener hogares estables, sanos, tenemos que dejar que cada hombre ejerza su rol de paternidad con sus hijos, nosotras como mujeres sabias e inteligentes, debemos dar dos pasos atrás y dejar que él vaya delante.
Y usted papá, la Palabra dice, que amen a sus mujeres, es el Amor la clave de los males de todo, escuche, ponga atención a lo que ella dice, y si hay que hacer silencio, hágalo, ambas partes, por amor a sus hijos y por el amor que se han tenido desde que se conocieron.
Padre, sea el ejemplo de sus hijos, sea el sustentador, el guía del hogar, tome tiempo para escuchar e interactuar con sus hijos, hable con ellos, dígale que los ama, aprecie el tiempo que ellos estarán en el hogar.
Y para aquellas mujeres que están solas sustentado sus hogares, oro al Padre para que les ayude a ser esa madre que sus hijos necesitan, nunca les hable mal de su padre ausente, entréguele a Dios sus luchas y cargas y siempre en cualquier de los casos mencionados, ore, necesitamos colocar a Dios en el medio del hogar.
Porque quizás hay muchos que tienen padres y es como sino los tuvieran, otros nunca lo han conocido y otros los han perdido, en cualquier de estos casos recuerde esto, tiene a Dios como su Padre celestial, usted no es huérfano, recíbalo y recibirá su identidad de hijo/a, Él lo ama con amor eterno y nunca ha estado
solo/a, Él siempre ha estado ahí para usted…
Bendiciones
Salmos 27:10
Reina-Valera 1960
10
Aunque mi padre y mi madre me dejaran,
Con todo, Jehová me recogerá.
EXCELENTE REFLEXIÓN DEL ROL DE LA FAMILIA Y ESPECIALMENTE EL LUGAR QUE LE CORRESPONDE AL PADRE EN EL HOGAR EL CUAL HA SIDO DESPLAZADO EN LA MAYORÍA DE LOS HOGARES. PONGANOSLO EN PRÁCTICA Y VIVIREMOS EN UNA MEJOR SOCIEDAD CON MEJORES VALORES.