SANTO DOMINGO.- El presidente de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) y del Consejo del Poder Judicial (CPJ), magistrado Luis Henry Molina Peña afirmó este miércoles que es necesario cuidar la función del juez porque en sus manos descansa la seguridad del Estado-Nación y la independencia Judicial.
El magistrado Molina Peña entiende es imperativo que los jueces, comprendan el proceso jurídico antes de emitir una opinión que pudiera afectar la independencia. Asimismo, explicó que esa realidad no escapa a los Medios de Comunicación, cuya labor implica hacer un equilibrio entre el derecho a informar y la necesidad de preservar el valor de la institución, y su legitimidad, como garantía de los derechos de todos.
El presidente de la SCJ explicó que en la autoridad de jueces y juezas recae la defensa de los seres humanos, porque los derechos que se sustentan en su labor son inherentes a las personas y objeto de interpretación judicial en cada decisión jurisdiccional.
Les exhortó además a abstenerse de pedir cosas que no corresponden, renunciar al truco que pone en peligro la independencia de criterio y dar la espalda a las presiones.
“Las agendas están cargadas del fragor del día a día, de los conflictos en caliente. La sociedad necesita de la distancia crítica suficiente en jueces y juezas.
Desde esa distancia es posible ver de manera imparcial y sesuda los conflictos sobre los que les toca decidir. Esa distancia es el marco de la verdadera independencia”, aseguró Molina Peña.
El magistrado entiende que constituyen garantías esenciales el comprender el Derecho como el sostén de la convivencia pacífica y fortalecerlo junto a la Justicia. Asimismo, consideró que existe una dimensión humanista en la misión ante el sistema jurídico e hizo un llamado a reconocerla y vivirla en la práctica.
Molina Peña, realizó sus planteamientos durante la audiencia de juramentación de 262 nuevos abogados y abogadas de la República, a quienes les exhortó contribuir con su conducta, abonar los valores del bloque de constitucionalidad, comprender el debido proceso como algo sagrado, porque en este descansa la vida, el primer y más importante punto de partida.
Durante la audiencia de juramentación de los nuevos profesionales de la Toga, se rindió homenaje a la abogada Hilda Gautreaux, por su valentía y lucha por la libertad y la Justicia. En dicho acto estuvieron presentes familiares de la homenajeada.
Sobre Hilda Gautreaux
Fue una joven abogada. Su valentía para la lucha por la libertad y la justicia la mantuvo firme y activa denunciando abusos, combatiendo, curando heridos de la Guerra Civil de abril de 1965, localizando y defendiendo sindicalistas, presos políticos y exiliados.
Su foto recorrió el mundo cargando en mula el cuerpo de una víctima del crimen de Estado. Su trabajo fue muy valioso asesorando legalmente a la resistencia tanto nacional como internacional. Los dirigentes sindicales contaban con su defensa gratuita, al igual que los activistas revolucionarios. Su compromiso con la lucha por la libertad y la democracia la convierten en una referente del Derecho dominicano.