SANTO DOMINGO. – El ministro de Educación, Antonio Peña Mirabal, instruyó a la Dirección de Gestión Ambiental y de Riesgos (DIGAR) para la activación de un plan de contingencia a nivel de las 18 direcciones regionales educativas, a fin de que tomen acciones preventivas a propósito del posible paso de la tormenta tropical Dorian por la cercanía de la República Dominicana.
“Estamos en contacto permanente con los directores de las regionales y de los distritos educativos para que adopten las medidas preventivas que indica el protocolo en casos como éste, además de que damos un riguroso seguimiento al fenómeno atmosférico a través de los reportes del Centro de Operaciones Emergencias (COE), dijo Carlos Darwin Martínez, director de la DIGAR en el Minerd.
Precisó que en el plan de contingencia en el que interactúan representantes de la DIGAR, los directores regionales y de distritos educativos, así como los directores de centros educativos, se prepara con toda la logística indispensable para hacer frente al fenómeno y sus remanentes de intensos aguaceros, en caso de que finalmente toque alguna región del país.
El funcionario invitó a las comunidades educativas a mantenerse informada sobre el curso de la tormenta, a través de los boletines oficiales que periódicamente ofrece el COE, al tiempo que aclaró que la docencia se mantiene en los planteles escolares a nivel nacional, y que sólo se suspenderá en las provincias que sean declaradas en alerta roja por el referido organismo.
“Tenemos que esperar el informe del COE para decidir las medidas de seguridad de los estudiantes, docentes y el personal administrativo en los planteles escolares y, en esa dirección, llamamos a los padres, madres y amigos de la escuela a que se mantengan igualmente atentos”, agregó.
Expuso que la DIGAR, conjuntamente con la Policía Escolar, mantendrán medidas preventivas de seguridad alrededor de los planteles ubicados en las provincias donde regularmente se producen inundaciones.
Martínez agregó que el comité de contingencia del Minerd comienza su trabajo desde el inicio mismo de la temporada ciclónica el primero de junio hasta el 30 de noviembre, con el acompañamiento de la Dirección de Mantenimiento de Infraestructura Escolar (DGMIE)), en tareas que pueden prevenir daños en caso de la ocurrencia de algún fenómeno natural, como son re-acondicionamiento de áreas verdes, fumigación, poda de árboles, asegurar los tinacos y otras acciones preventivas.