El Comité Nacional de Lucha Contra el Cambio Climático, CNLCC, y el Instituto de Abogados para la Protección del Medio Ambiente, INSAPROMA, advirtieron que la escasez de carbón mineral para alimentar a la Central Termoeléctrica Punta Catalina, CTPC, no es pasajera ni accidental.
Las entidades aseguraron que los problemas de abastecimiento de carbón que confronta actualmente la Central Punta Catalina continuarán y se agudizarán al punto de no encontrar suplidores y además tendrán que adquirir este combustible a precios que harán inviable su producción.
Urgieron al Gobierno dominicano a cambiar a gas natural las plantas de carbón de Punta Catalina lo antes posible para evitar que se conviertan en activos varados, perdiéndose más de 4 mil millones de dólares invertidos en la construcción de esta central.
Explicaron que si no transforman en un plazo breve a Punta Catalina a gas natural, no podrán hacerlo porque no valdrá la pena. “La tendencia histórica es que en los próximos años desaparezca el carbón y su encarecimiento, a la vez que el gas natural continuará subiendo de precio, perdiendo la competencia con las energías renovables que cada vez son más baratas”.
Indicaron que dentro de unos años, si no se convierte ahora Punta Catalina a gas natural, sería preferible venderla como chatarra y los recursos que se emplearían para esta conversión invertirlo en generar electricidad con energía solar o eólica. “Esta situación se denomina en economía bajo el concepto de activos varados o sin salida en el mercado, que es la mayor amenaza que pende sobre la Central Termoeléctrica Punta Catalina”.
Manifestaron que la única manera de poder recuperar la inversión que se ha hecho en Punta Catalina es convertirla a gas natural mientras este combustible pueda competir en precio de producción con las energías de fuentes renovables.
Plantearon que ya en muchos países las energías renovables están desplazando al gas natural por su bajo costo y finalmente, hacia la década del 2030, el gas natural junto con los demás fósiles, serán abandonados de forma significativa por razones del cambio climático.
Señalaron que habían advertido en numerosas ocasiones que la única manera de que Punta Catalina pudiera funcionar al menos durante una parte de su vida útil, sería cambiándola a gas natural. “Esta advertencia la hicimos frente al Tribunal Superior Administrativo, en el año 2015, en ocasión del amparo preventivo ambiental que depositamos para que estas plantas no operaran con carbón”, observaron.
Recordaron que cuando el Premio Nobel y presidente fundador del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático, IPCC, Rajendra K. Pachauri, visitó al país en año 2017 para recibir la máxima distinción de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, UASD, pronosticó que esta central no podría funcionar por más de cinco años porque no conseguiría carbón en el mercado o sería imposible comprarlo por su alto precio.
Exhortaron a que el presidente de la República, Luis Abinader, ordene la inmediata conversión a gas natural de Punta Catalina, ante todo a causa de los daños que produce la contaminación de esta central en la salud y en el medio ambiente de la población de la provincia Peravia, pero también para salvar y recuperar, aunque sea en parte, la gran inversión hecha en esta termoeléctrica que de lo contrario se perderá.
“La brecha de precios entre las energías renovables y el gas natural es cada vez más grande a favor de las renovables, lo que quiere decir que es muy probable que para antes de cinco o siete años este último combustible no podrá competir, especialmente con la energía solar, en la generación de electricidad. Antes de que esto ocurra debe convertirse Punta Catalina a gas natural, porque si se espera a que llegue ese momento sería imposible hacer este cambio, siendo la única opción su abandono puro y simple”, significaron.
Igualmente expusieron que la forma más rápida y barata para superar los fallos estructurales que adolecen las plantas de Punta Catalina, es convirtiéndolas a gas natural.
“La causa fundamental de los fallos de estas plantas es por estar siendo sobrealimentadas de carbón muy por encima de su diseño de fábrica, la cual desaparecería al convertirse a gas natural, incrementándose su eficiencia energética”, alegaron.
Adujeron que la construcción de Punta Catalina a carbón fue un gravísimo error de la anterior administración que se debe enmendar de inmediato, a riesgo de perder la gran inversión hecha por el pueblo dominicana en esta obra.