Con una Eucaristía los obispos de la República Dominicana iniciaron la 58° Asamblea Plenaria, ofrecida especialmente por el Papa Francisco, la salud de los afectados de coronavirus (COVID-19) y las próximas elecciones presidenciales y congresuales.
La Eucaristía, presidida por Monseñor Ghaleb Bader, nuncio apostólico, fue concelebrada por los obispos de la Conferencia del Episcopado Dominicano (CED), y transmitida por diversos medios de comunicación: televisión, radio y medios digitales.
Durante la homilía, el nuncio se refirió a las exigencias que se toman en cuenta para nombrar a un obispo, entre las que se incluyen la evaluación de los estudios, títulos académicos, cualidades humanas, espirituales, pastorales y administrativas del candidato.
Resaltó cuatro puntos fundamentales para seguir a Jesús: el sentido material o físico, dejándolo todo, tomar la cruz y ser testigos, concluyendo que “seguir a Jesús es muy exigente, pero vale la pena…sabemos que la cruz no es solo un instrumento y un símbolo de sufrimiento, sino también una expresión de amor y un instrumento de salvación”.
Asimismo, Monseñor Diómedes Espinal de León, obispo de Mao-Montecristi y presidente de la CED, pidió a los feligreses orar por el Papa Francisco y su misión, la 58 Asamblea Plenaria, el fin de la pandemia del COVID-19 y las elecciones presidenciales y congresuales a celebrarse el próximo 5 de julio.
Desde el 28 de junio al 2 de julio, los obispos están reunidos en la Asamblea Plenaria, en la que elegirán las nuevas autoridades de la Conferencia del Episcopado Dominicano (CED), sus Comisiones Nacionales de Pastoral, Comisiones Episcopales y Especiales por tres años.
Sobre la Asamblea Plenaria
Es el conjunto de todos los obispos de la CED junto al representante de la Santa Sede. Se reúne anualmente y cada año tiene una temática específica centrada en informar sobre las diócesis, conocer el trabajo de las comisiones, temas varios de interés para la CED y elección de la nueva directiva, que se realiza cada tres años.